Nuestros fines

Soli Deo Gloria

Honrar, adorar a Dios y predicar su Palabra en culto Público para Su gloria.

Señor, digno eres de recibir la gloria y la honra y el poder; porque tú creaste todas las cosas, y por tu voluntad existen y fueron creadas” (Ap 4:11).

Divulgar el evangelio

Divulgar públicamente el evangelio de Jesucristo utilizando para ello todos los medios de comunicación a su alcance.

“¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique?” (Ro 10:14).

Discipular

Enseñar, instruir y discipular en el conocimiento de las Sagradas Escrituras y las enseñanzas y doctrinas del evangelio de Jesucristo a todas las personas que deseen voluntariamente recibir tal instrucción.

“Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén” (Mt 28:19-20).

Pastorear

Ayudar a los miembros de la Iglesia en su desarrollo espiritual.

“Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por ganancia deshonesta, sino con ánimo pronto” (1 P 5:2).

Ayudar al prójimo

Ayudar al prójimo en respuesta al compromiso cristiano, procurando suplir principalmente sus necesidades espirituales, y también sus necesidades físicas y materiales en la medida de las posibilidades y medios de los que la Iglesia disponga, mayormente a los de la familia de la fe.

“Así que, según tengamos oportunidad, hagamos bien a todos, y mayormente a los de la familia de la fe” (Gá 6:10).

Ser luz al mundo

Extender el reino de Dios por medio de la predicación del evangelio y la Palabra de Dios, la oración, el testimonio cristiano, la implantación de nuevas iglesias y puntos de misión y el fortalecimiento en la fe de los creyentes.

“Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos” (Mt 5:16).